viernes, 29 de diciembre de 2006

calles



hacía frio. tu me decías que siempre tenía demasiado frio cuando, en verdad, no lo hacía y me regañabas por quejica.
teníamos un paraguas que compramos allí mismo porque nunca pensabamos, que nos iba a llover.
nunca me gustó la lluvia pero allí, contigo, sentí que empezaba a gustarme. con todo el frio que hacía,
con los guantes y bufandas, me dabas besos en la mejilla con unos labios más febriles que aquellos cielos en
escala de grises. tomamos chocolate caliente, nos hablaron de audrey hepburn y comimos menos sano de lo que deberíamos
y fue el mejor viaje que hice nunca. las calles eran tan pequeñas y acogedoras que era demasiado fácil sentirse de
allí. me gustó estar allí contigo. y que aquella ciudad, estuviera con nosotras.

miércoles, 20 de diciembre de 2006

insípida

y a pesar de todo, me alejo.
soy propensa a esconderme cuando el Cáncer empieza a palpitarme,
pecho izquierdo,
y amenaza con destruirme.
con volverme inservible.
diplomado en convertirme en invisible,
en no mirar si a mi miran.
monótona, abandonar la sala
si me veo acorralada.

ni la mitad, ni bien un cuarto,
ni de lejos, ni a ratos
sé limpiar mi nombre.

mediocre y universal
tan habitual como trivial.
insípida
y común.
ni de broma,
puedo cambiar mi forma de caminar.
ni me esfuerzo en negar,
mi falta de personal
ni las ganas
de volverme otra
en las incómodas horas huérfanas de dignidad.
y no me limpia de nada,
ser honrada y declararme una más
solo,
me vuelve más mal nacida
y menos especial.

martes, 19 de diciembre de 2006

violeta

violeta fué una persona que -creo- ayudó a cambiar mi vida. de esas personas que, sin necesitar mucha atención, al pasar dejaba un aire a desconocido. de esos trozos que te cambia la gente que no son como los demás. seguramente, ella no lo sepa. yo tampoco se lo dije porque hay cosas que no pueden decirse. y yo no pude en el tiempo que pasé largas noches conversando y definiendo nuevos formas de sentir. pero siempre fué ella, y lo que decía, lo que me llevó al momento de escribir sobre ella. pero esto, tampoco lo supo nunca.


Violeta se desnuda con una canción que no es suya.
Violeta que lleva coletas de recuerdos en cada letra,
Violeta se inventa nombres y los pega.
Violeta se presenta vacia,
se muestra a un lado con negra letra
e insinuandose entre media linea recta y circunferencia,
se entremezcla con colores inexistentes
y fotografia su mente.
que cuenta una historia que para ella nunca empieza,
pero escribe sobre ella.
- ¿y si fuera? -
Violeta se presta divertida a las hazañas de sus poesias,
que se atreven a grabar papel de una madre con hija
que llevaba el tuyo por nombre, Violeta.
Violeta se pega.
Que se abre a golpes de tintero,
que ni queriendo se estropea.
Violeta que pinta y despinta a su antojo,
que brilla con sol rojo.
Violeta que no se deja.
se encripta con mil formas diferentes para que nadie la encuentre.
se muestra afable en tumbarse
con frases que sabe que no debe temer,
Violeta se dibuja a ella en sus diferentes pieles.
Violeta tan suya, tan sola y tan mucha,
Violeta desconocida,
con olor a tormenta.
Violeta que envidia serena,
Violeta que inconsciente es condena.
Violeta que es bala en cañon de pistola,
que se aferra a la blanca bandera.
Violeta musicalmente se baila,
que casi la veo danzando descalza.
Para, Violeta
que me lleva la corriente en tu rio de siluetas.
Que llevas por apellido mil y una noches que desenfocan,
que se vuelven escala de grises.
Violeta que cuenta y me deja,
Violeta que rie se crea.
de cristal opaco y buzones de retratos,
sin diccionarios, ni imprentas.
Violeta baja el telón y juega fuera,
Violeta colorea con cariocas las aceras.
que se pasea aun si ha llovido,
Violeta que pisa los charcos.
Violeta arcoiris,
del color de tu iris.
Violeta se intuye,
se destiñe en sus palabras
que son color incorpóreo y tan enteras,

Violeta,
que suspende su sonrisa en un reojo.

lunes, 18 de diciembre de 2006

llegó el frio

llegó el frio y,
cogiendome por sorpresa; heló mi corazón.
pensé,
¿se habrá parado ya?
aun era demasiado pronto para saber que ibas a ser tu pero confieso,
saber a qué venías desde el principio.
lo cual,
no evitó que metiera mis narices en la nata del pastel.
pero pude, en algún momento que no supe,
haberlo hecho.
ahora que todo queda atrás,
no parece haber sido tan grave pero, ya no hay compás que bailar,
ni ronroneo,
que me calme por las noches.
se duerme,
cada parte de mi Yo,
ahora que todo está frio.
cuando recuerdo que fuimos no hace tanto y ahora volvemos el camino
con los pasos de un gigante
y los pies desencajados.
no sé bailar a tu son,
ni te seguí el ritmo aquella vez que,
me retaste en la pista de baile que no era más que un escenario de tu vida.
es, demasiado tarde
para pretender no haberlo hecho.
el haberte sonreido como un día me negué,
el haberme enloquecido pensando que podrías, alguna vez,
decirme te extrañé.
como yo lo hice.

es, otra vez,
demasiado tarde
para olvidarme de cuándo decidí dejar atrás mi falta de fe y confesarme,
al verbo que sirve al Amor.

lunes, 11 de diciembre de 2006

la vida es

la vida es, tiempo. y su contrario, sueños que lo duermen.
que aunque lo parece, no están tan lejos. si yo lo sé, es cuestión de una hora y media el verte. o dejarlo todo, que no es mucho, y buscarme una nueva habitación a la que ponerle nombre y de paso, ponerle uno nuevo a mi vida.

ahora, todos saben escribir. a la mierda, yo no sé hacerme entender. por eso cuando me leen solo ponen caras raras y yo sonrio como sabiendo que no tiene sentido intentar explicarte qué hay escrito. ahora, todos quieren hablar de cosas metaforicas y de sentimientos tan solo suyos. historias que nadie lee, historias como la mía, vulgar y corriente, niña que traumatiza a su resistencia con frases que mientras más se enganchen, más la lian y la arrastran al fondo del no volver a salir nunca más.
navidad, navidad, dulce navidad.
me siento mas lenta y vacia que el resto del año y no tengo dinero ni para regalarme un abrazo. ni nieva, ni se congela mi infierno. ni creo ya en pedir deseos al soplar las velas ni en pedirle tu corazón a los reyes magos.

con calma, perdiendo quizá la paciencia que tenía hace unos días, montando castillos de naipes en el agua y ahogándolos con mis diez dedos. dedos que se pasean por el polvo de mi cama, labios que se borran cuando no hay donde ponerlos.
¿quién no se ha enamorado del amor nunca? unos a otros nos convertimos, en típicos y tópicos. y el intentar sobresalir, te convierte en un maldito duende sin piernas suficientes.

corre Extraña, corre. entre las calles que tu misma has dibujado, siempre ahorcándose con sus cordones, siempre, abriendo el corazón y tatuando nombres de super estrellas muertas. que siempre quieres entrar donde menos te esperan, que te da igual, si en vez de una tormenta te caen dos. o millones de ellas.

sábado, 9 de diciembre de 2006

pestañeas

nada. eso es lo que pasa cuando pasan las horas; nada.
te escribo aqui porque nadie sabe que existo.
soy el maullido del triste gato pardo de mi corazón, los segundos de un reloj que tictatean mis pulmones ahora dormidos, el golpe con tan mal fortuna fué a darme en el centro de mi cordura.
dramas que escapan de entre mis dientes como caries, silencios tan largos como noches para el preso. nudos y trapecistas, vueltas y saltos mortales. circulando por un estrecho camino ibamos las dos, lluvia y frio, vuelve la melancolia del saberse querido.
esperado.
pero, nada.
siempre me escondí cuando traté de llamar la atención, al revés del mundo yo soy, cuando todo el mundo duerme.
cuando pongo un sobrenombre a lo que sale de mi boca y transformo la forma que tengo de decirte que creo,
que te quiero.
pero es inútil si me quedo esperando que todo este mundo paralelo vaya a hacerme el trabajo, o vaya a presentarse en tu casa con mil rosas en la mano y una boca como un payaso.
pero es inútil si cada vez que lo cierro me vuelvo de hierro y me empeño en contarte algún cuento para niños que sé que no vas a creer pero, por respeto, escuchas y sales disparada a tu quéhacer de eterna sonriente y complaciente con la vida. yo he visto sombras tas el brillo de tus ojos y tu,
pestañeas para no dejarme ver.
y tu,
me revoloteas en el estómago cuando pienso que nadie más podrá quererme.

lunes, 4 de diciembre de 2006

querida

esto, es el final.
sé, que pretendes hacerme creer que nunca empecemos y que por ello, no sabes a qué viene esta despedida vulgar y dramatica.
las cosas que no llevan un nombre. ni me llevo el tuyo escrito entre las piernas ni el mio -de prestado-, se quedará en tu corazón. las cosas que si lo llevan,
son todo lo que queda a nuestro alrededor.

es verdad, no sé que ha pasado. porque han sido dos días contados los que sonreía con tu nombre entre mis dientes, siseando imposiblemente la única vocal de tu nombre. si me descuido, me atrapas.
pero es demasiado profundo el pánico que aspiro cada vez que respiro en algún lugar donde tu no estás. como si tu ausencia fuera contaminación para el único pulmón que me respira por la boca, cuando la abro y que no sea para hablar.

no será a mi, a quien le cuentes tu secreto.
podría enamorarme de ti, lo sé.
y pasarme el resto de la vida pensando en ti y en todas las cosas que me haces, me dices y te aman. pensando en qué posibilidades tengo de que des media vuelta y te vengas conmigo. remotas, perdidas
trágicas despedidas.
tú y yo, nunca fuimos amigas. pero tengo que llamarte de alguna forma y perdóname, si no te encaja el nombre ni se parece de reojo a lo que eres. si, alguna vez, le dije a alguien que podrías ser mi vida.

querida,
hice este blog para ti pero ahora, parece haber perdido toda la magia.
ahora, parece más aburrido y triste de como lo imaginé.
buscando el tiempo,
donde colocarte para el resto y llévate contigo,
los mil besos que nunca te dí.